Este artículo tiene como objetivo analizar la primera década de la existencia de la Campaña Nacional para la Mejora de la Enseñanza Superior (la actual Capes), que abarca el período de 1951 a 1960, ubicando a la institución en el ámbito del aparato estatal federal en un contexto histórico marcado por el modelo nacional-desarrollista. Para lograr esta meta son elementos esenciales el uso de informes, cartas, mensajes presidenciales y documentos legales articulados bajo el signo de la utilización de estrategias y tácticas por individuos colectivos que construyeron una red institucional que llevó la Capes a ocupar un papel central en la elaboración de políticas públicas de educación en el seno del Ministerio de Educación. Esto tuvo como resultados el intento de construir de un sistema nacional de posgrado que constituye un legado para ser examinado en el tiempo presente.